La calidad de la comida es excepcional, con platos deliciosos y una clara atención a la calidad de la materia prima. El servicio es amable y el personal está dispuesto a ayudar con traducciones y sugerencias de menú. El lugar también cuenta con un patio encantador que añade a la atmósfera general.

El menú ofrece una variedad de platos agradables, incluyendo tartar de huevas, carpaccio de amanita, tuétano asado, riñones con cebollino, entre otros. También se destacan platos más tradicionales como el solomillo. Los comensales han mencionado que las patatas crujientes se equilibran perfectamente con la morcilla y los pimientos, y que la raya es tierna y sabrosa.

La experiencia de comer en este restaurante es absolutamente fantástica. Los comensales han mencionado que es incluso más satisfactorio que cenar en un restaurante con estrellas Michelin. Además, el restaurante ofrece una excelente relación calidad-precio en sus vinos, y está dispuesto a dividir las comidas en dos platos para dos personas.

El restaurante tiene un ambiente icónico, con una mezcla de influencias francesas, gallegas y vascas. Se describe como súper acogedor, y se siente como si estuvieras en una película de los años 70. Además, el propietario ofrece una excelente selección de vinos naturales.